Una vez más, El reino español emplea su violencia en el conflicto catalán al imponer duras penas políticos soberanistas. El derecho de autodeterminación y al hecho de poner urnas se paga con penas de prisión que oscilan entre 9 y 13 años.
Esta sentencia no hace más que complicar el problema de fondo que tiene el Estado, al mostrar su incapacidad para facilitar una oferta democrática a las naciones existentes en su seno. Para el Estado lo importante es mantener su unidad, y para garantizarla recurre a la represión y a la violencia política, sin situar el problema en términos democráticos. Con ello, se agrava aún más su crisis territorial.
SORTU participará en las movilizaciones convocadas por Gure Esku para esta tarde y se adhiere a las convocadas por el movimiento juvenil Ernai para el mediodía del 17 de octubre. Además de las mismas, también llama a participar en las movilizaciones que se convoquen en solidaridad con Catalunya y en contra de esta sentencia.