A 40 años de la Constitución española. Declaración de Gernika

Por la independencia, el socialismo y el feminismo.

Hoy, militantes de diferentes generaciones de la izquierda abertzale nos hemos reunido en el mercado de Gernika, 81 años después de su bombardeo por los fascistas, y pasados 40 desde que la Constitución Española nos fuera impuesta a vascas y vascos.

Hace 40 años dijimos que la Constitución española no supondría una democracia, una justicia y una paz verdaderas para el pueblo vasco. Advertimos de la imperiosa necesidad de realizar una ruptura democrática con el franquismo y su legado para alcanzar tales objetivos. Avisamos de que aquella denominada Transición Democrática no era más que una “transacción”, cuyo fin no era otro que dejar todo “atado y bien atado”. Fue el propio Franco quien designó como su sucesor a Juan Carlos de Borbón; el alzamiento del 36 y todos los crímenes franquistas quedaron absolutamente impunes, y los aparatos del Estado, como el Ejército, la Policía, el poder judicial, las élites económicas y los grandes medios de comunicación, no transitaron hacia su democratización.

En aquel entonces dijimos que la Constitución española consagraba los dos pilares del franquismo: la unidad de España y el capitalismo. Dijimos que iba a ser una cárcel de pueblos. Dijimos que priorizaba los intereses de las élites económicas y la oligarquía, en perjuicio de la clase trabajadora y los sectores populares. También dijimos que el reconocimiento del derecho de autodeterminación era la llave para abrir ambos candados.

Dijimos más. Dijimos que el desarrollo de los estatutos de autonomía sujetos a ese andamiaje constitucional estaba totalmente hipotecado; que constituirían una especie de libertad vigilada; que de su mano este pueblo no conseguiría ni su libertad nacional ni su emancipación social; más bien al contrario, dijimos que las obstaculizaría, al imponer una nueva división territorial y administrativa a nuestro pueblo.

Hoy decimos que en el transcurso de estos 40 años ha quedado demostrado el carácter impositivo, antidemocrático y violento del régimen del 78. Hoy decimos que el tiempo nos ha dado la razón, que la izquierda abertzale acertó plenamente en el diagnóstico político realizado hace 40 años, que ese diagnóstico tiene mayor vigencia que nunca, y que hoy una mayoría de los pueblos vasco y catalán, así como amplios sectores del estado español, lo comparten.

Hoy decimos que esta constitución tiene poco de democrática. De su mano este pueblo ha padecido la guerra sucia, la tortura, las ilegalizaciones, el cierre de medios de comunicación, la dispersión, los recortes de derechos civiles y políticos… De su mano han venido las privatizaciones, la corrupción, los desahucios, la imposición del artículo 135, el constante recorte de derechos sociales… Haya un gobierno de un color u otro, mandan las élites económicas, el IBEX-35 y la gran banca, los mismos que se enriquecieron y mandaron durante el franquismo. Y ante toda esa violencia sistémica y sistemática ha imperado e impera la impunidad.

Hoy decimos que el agotamiento de los estatutos de autonomía y del propio autonomismo es un hecho evidente. El “cepillado” del Estatuto de Gernika y del Amejoramiento Navarro ha sido una constante desde el autogolpe de 1981 y la LOAPA. 40 años más tarde decenas de competencias continúan pendientes de ser transferidas. La vulnerabilidad de nuestro autogobierno y nuestros derechos es mayor que nunca, por estar sujetas y depender de las necesidades del Gobierno español de turno, lo que en la práctica las convierte en provisionales y siempre reversibles.

Hoy corroboramos que el franquismo sigue muy presente y enraizado en la misma esencia de este sistema. No sólo eso, hoy decimos que ese legado franquista está siendo revitalizado de la mano del neo-falangismo de la derecha española, en ausencia total de una oposición firme y coherente por parte de la izquierda española. Hoy decimos que el régimen del 78 ha renunciado a cualquier posible intento de seducción democrática de los pueblos sin estado, apostando por la recentralización y la violencia como única opción de mantener el actual statu quo, como lo demuestran las cargas policiales en el referéndum del 1 de octubre en Cataluña, la aplicación del artículo 155 y el chantaje económico y la instrumentalización de la justicia empleados contra el Procés.

Hoy decimos que la dependencia para con España que supone este marco jurídico-político es totalmente nocivo para la sociedad vasca; que este marco jurídico-político es un instrumento para transferir la riqueza generada por las clases trabajadoras y populares de Euskal Herria tanto a las élites oligárquicas españolas como a las locales, las cuales se aprovechan de dicha situación. Hoy decimos que este marco jurídico-político es un obstáculo que impide satisfacer los deseos y necesidades que vascas y vascos tenemos en todos los órdenes de nuestras vidas, que impide nuestra libre determinación y autogobierno en todos ellos.

Hoy, como hace 40 años decimos que para que Euskal Herria conozca una democracia, una justicia, una libertad y una paz verdaderas resulta imprescindible plantear una ruptura democrática con el sucesor del franquismo que es el régimen del 78. Sin embargo, también decimos que esa ruptura no es posible a escala de Estado español. No hay condiciones para ello. Esa ruptura tan solo es posible de la mano de los pueblos y naciones sin Estado.

Hoy, desde Gernika, nos dirigimos a las naciones sometidas por el Estado español. Sobre todo a sus sectores trabajadores y populares: la solución a nuestra situación tiene un denominador común: la autodeterminación, la soberanía. Herramienta imprescindible para poder construir sendas repúblicas independientes, socialistas y feministas, a su vez, único proyecto capaz de garantizar dicha soberanía en todo su alcance y dimensión. Así pues, es hora de unir nuestras fuerzas, ya que sólo la colaboración y articulación entre los pueblos podrá traer una justicia, una democracia, una libertad, una igualdad y una paz con mayúsculas.

Hoy, en Gernika, nos hemos reunido militantes de la izquierda abertzale de diferentes generaciones. Hemos sido perseguidos, enterrados en cal viva, ilegalizados, torturados, encarcelados y asesinados por esta pseudodemocracia. Pues bien; 40 años después aquí estamos, vivos, en pie y firmes, dispuestas y dispuestos a culminar el proceso de liberación.

Para terminar, damos las gracias de todo corazón a las miles de compañeras y compañeros que han luchado tanto en la calle como en las instituciones, a las que han quedado en el camino: Santi, Josu, Jon, Jokin… a las que están en la cárcel o el exilio, a sus familiares, a todas aquellas que alguna vez nos habéis otorgado vuestro voto y confianza… No lo dudéis: vamos a ganar; este pueblo va a conseguir la paz y la libertad; este pueblo va a conseguir un estado independiente, socialista, feminista y euskaldun.

 

Gora Euskal Herria askatuta!

Gora Euskal Herria sozialista!

Gora Euskal Herria feminista!

 

En Gernika,

2 de diciembre de 2018

Gernika, 2 de diciembre de 2018

 ---------------------------

Participantes:

En la declaración de Gernika han estado presentes:

Arkaitz Rodriguez

Rufi Etxeberria

Antton Lopez “Kubati”

Oihana San Vicente

Haritz Romeo

Gotzon Elizburu

Xabier Iraola

Kizkitza Gil de San Vicente

Pablo Gorostiaga

Lur Albizu

Pako Letamendia “Ortzi”

Izar Hernando

Maite Sabalza

Pello Otxandiano

Xabier Amuriza

Rafa Diez Usabiaga

Sonia Jacinto

Iñaki Antiguedad

Rakel Peña

Elena Beloki

Gotzon Kortazar

Marije Fullaondo

Juan Mari Madariaga “Madari”

Nuria Alzugarai

Jose Mari Olarra

Jagoba Zulueta

Haimar Altuna

Helena Franco

Joseba Permach

Iñaki Ruiz de Pinedo

Iratxe Delgado

Eugenio Etxebeste “Antton”

Jose Luis Elkoro

Edurne Brouard

Arnaldo Otegi

Iñigo Iruin

Olaia Matxain

Gorka Elejabarrieta

Asier Zamorano

Antton Morcillo

Ibon Arbulu

Arantza Zulueta

Iñaki O´Shea

Santi Hernando

Carmen Galdeano

Juan Mari Olano

Karmelo Landa

Lola Gomez

Xabier Ugartemendia

Tasio Erkizia

Jasone Manterola

Eulate Zilonizaurrekoetxea

Jose Ramon Etxebarria

Pipe San Epifanio

Julen Larrinaga

Dabid Lizarralde

Maddi Isasi

Ibon Meñika

Ino Galparsoro

Jose Mari Esparza

Joana Regueiro

Endika Guarrotxena

Joxean Etxeberria

Xabier Alegria

Gari Arriaga

Oihana Garmendia

Urtza Alkorta

Iñaki Goioaga

Anjel Mari Elkano

Xabier Zubizarreta “Txiron”

Itziar Abellanal

Julen Aginako

Loren Arkotxa

Iñaki Lizundia

Joseba Enbeita “Gorri”

Karlos Renedo

Nerea Gijarrubia

Alfonso Zenon

Amaia Montorio

Pako Aranburu “Indio”

Koldo Zelestino

Marisa Alejandro

Isabel Mandiola

Josu Barandika

Karmel Etxebarria

Iker Rodrigo

Entonces dijimos que la Constitución española consagraba los dos pilares del franquismo: la unidad de España y el capitalismo.
Hoy decimos que el tiempo nos ha dado la razón, que la izquierda abertzale acertó plenamente en el diagnóstico político realizado hace 40 años, que ese diagnóstico tiene mayor vigencia que nunca.
También decimos que esa ruptura no es posible a escala de Estado español. No hay condiciones para ello. Esa ruptura tan solo es posible de la mano de los pueblos y naciones sin Estado.